Qué hacer si sientes que estás dando más en la relación

Qué hacer si sientes que estás dando más en la relación

Es normal sentir que en una relación se da más de lo que se recibe en ciertos momentos. Si alguna vez te has preguntado qué hacer si sientes que estás dando más en la relación, no estás solo. Muchas personas, en diferentes etapas de sus relaciones, experimentan esta sensación. Puede ser frustrante y agotador, pero hay formas de abordar esta situación sin que se convierta en un conflicto. Así que, si te encuentras en este lugar, aquí te dejo algunas estrategias que pueden ayudarte.

Reconocer tus sentimientos es el primer paso

Antes de poder actuar, es fundamental que reconozcas y valides lo que sientes. Pregúntate: ¿por qué sientes que estás dando más? Puede ser que estés invirtiendo más tiempo, esfuerzo emocional o incluso financiero en la relación. Reflexiona sobre momentos específicos que te hayan llevado a esta conclusión. Por ejemplo, tal vez siempre seas tú quien proponga planes o quien esté dispuesto a escuchar las preocupaciones de tu pareja sin que ella haga lo mismo por ti.

Ejemplo práctico: ¿Quién propone las cenas?

Imagina que cada vez que decides salir a cenar, eres tú quien busca el restaurante, hace la reserva y organiza todo. Si esto sucede repetidamente y tu pareja nunca toma la iniciativa, es natural que te sientas frustrado. Esta sensación de desequilibrio en la relación puede hacer que te cuestiones el compromiso de tu pareja.

Comunicación abierta y honesta

Una vez que hayas identificado tus sentimientos, es momento de hablar. La comunicación es clave en cualquier relación. Aborda el tema con tu pareja de forma abierta y sincera. Explica cómo te sientes y proporciona ejemplos concretos de situaciones que te han llevado a sentir que das más de lo que recibes.

Consejos para una conversación efectiva

  • Escoge un momento adecuado: No hables de esto cuando estén en medio de una discusión o cuando alguno de los dos esté estresado.
  • Usa “yo” en lugar de “tú”: En lugar de decir “tú nunca me escuchas”, intenta “yo me siento ignorado cuando no se me presta atención”.
  • Escucha a tu pareja: Dale la oportunidad de expresar sus propios sentimientos y perspectivas.

Establecer límites saludables

Es importante establecer límites en cualquier relación. Si sientes que estás dando demasiado, es posible que necesites replantear lo que estás dispuesto a ofrecer. Esto no significa que debas cerrar la puerta a tu pareja, sino que debes cuidar de ti mismo. Poner límites puede ser un acto de amor propio y puede ayudar a equilibrar la dinámica de la relación.

Ejemplo de límites

Si siempre eres tú quien se queda despierto hasta tarde para hablar con tu pareja, pero sientes que nunca te devuelven el favor, podrías establecer un límite. Podrías decir: “Me gustaría que ambos tuviéramos tiempo para descansar, así que a partir de ahora, trataré de ir a la cama un poco más temprano”.

La relación en su conjunto

Es posible que sea útil dar un paso atrás y evaluar la relación en su conjunto. Hazte preguntas como: ¿mi pareja muestra interés en mis necesidades? ¿Hay reciprocidad en nuestra relación? Reflexiona sobre si esta sensación de dar más se ha vuelto un patrón constante. Si es así, puede que sea el momento de considerar si esta relación es lo que realmente deseas.

Ejemplo de evaluación

Si después de pensarlo te das cuenta de que siempre eres tú quien hace sacrificios, puede ser el momento de evaluar si realmente estás en una relación equilibrada. Pregúntate si tu pareja también te ha apoyado en momentos difíciles o si siempre eres tú quien debe adaptarse a sus necesidades.

Buscar apoyo externo

A veces, hablar con amigos o familiares sobre tus sentimientos puede ofrecerte una perspectiva diferente. Ellos pueden ayudarte a ver la situación desde un ángulo nuevo o incluso ofrecerte consejos que quizás no habías considerado. Además, si la situación se vuelve muy complicada, podría ser beneficioso acudir a un terapeuta de pareja. La terapia puede proporcionar un espacio seguro para expresar tus inquietudes y trabajar juntos en las dinámicas de la relación.

El valor de la perspectiva externa

Imagina que hablas con un amigo cercano sobre tus sentimientos. Su respuesta podría ayudarte a ver que tus preocupaciones son válidas y que no estás solo en tus experiencias. A veces, escuchar la opinión de alguien más puede ser un gran alivio y puede ayudarte a tomar decisiones más claras.

Practica la auto-cuidado

No olvides que cuidar de ti mismo es esencial. Si sientes que estás dando más en la relación, es crucial que también inviertas tiempo en ti mismo. Dedica tiempo a tus hobbies, sal con amigos o simplemente disfruta de un buen libro. El auto-cuidado te ayudará a recargar energías y a sentirte mejor contigo mismo, lo que a su vez puede influir positivamente en tu relación.

Ejemplo de auto-cuidado

Si disfrutas de hacer ejercicio, considera inscribirte en una clase de yoga o simplemente salir a caminar. Esto no solo te ayudará a sentirte mejor físicamente, sino que también te proporcionará un espacio para reflexionar sobre tus sentimientos y tu relación.

Evalúa la relación a largo plazo

Si después de hablar con tu pareja y establecer límites sigues sintiendo que estás dando más, puede que sea el momento de evaluar la relación a largo plazo. Pregúntate: ¿esta relación me aporta felicidad y crecimiento? Si la respuesta es no, quizás necesites considerar tus opciones de forma más seria.

Ejemplo de evaluación a largo plazo

Si tras varias conversaciones no ves cambios, y la sensación de estar desequilibrado persiste, puede que necesites poner en la balanza lo que está en juego. Piensa en tus objetivos de vida y si tu pareja comparte esos mismos deseos. Si no es así, quizás sea el momento de considerar si esta relación es la adecuada para ti.

Qué hacer si sientes que estás dando más en la relación es una pregunta que muchos se hacen. La clave está en reconocer tus sentimientos, comunicarte de forma efectiva, establecer límites saludables y cuidar de ti mismo. No olvides que mereces una relación donde ambos se apoyen y se equilibren mutuamente. ¡Sigue adelante, tu bienestar emocional es lo más importante!